Los medios de comunicación son una fábrica de ideas, en donde solamente el espectador debilitado las adopta como suyas, el fortalecido las capta como un punto inicial de análisis y recopilación de datos para ello, sin embargo si los datos están manipulados, entonces estos influyen directamente en la opinión individual y luego en la colectiva, y tal situación provoca que una situación certera producto del un examen de conciencia pueda convertirse en falsa ante la influencia masiva, como si la verdad se obtuviera por mayorías. El ataque que se realiza a la política lópezobradorista es un ataque gestionado en los medios de comunicación dominados por la esfera empresarial y pos quienes repiten el mensaje captado, pero en los hechos y al momento de emitir un voto, el ataque a la administración lópezobradorista se queda en el micrófono mal intencionado pero no en la determinación ciudadana. Los medios de comunicación son públicos aunque algunos canales estén manejados por particulares, por lo que la participación en medios mal empleados por parte de un comunicador, no resulta incorrecto sino una expansión de sus ideas periodísticas, siempre y cuando no cambie su pensamiento natural por su conveniencia política o económica. La participación de personajes inteligentes en una pantalla creada para que el público no lo sea, como es el caso de Maya Zapata, Ana de la Reguera, Tomás Mojarro, Lorenzo Meyer y otros, no resulta un pecado capital si ante la pantalla dolosa el comentario es leal a su pensamiento no alquilado. Sin embargo también se ha presentado caos de "el canto de las Sirenas" y aquellos que eran intelectuales de la comunicación se convirtieron en comunicadores inorgánicos. Más en www.somoselespectador.blogspot.com