Si el problema que actualmente guardan los medios de comunicación fuera únicamente económico o de cruce de intereses, su recuperación sería menos complicada; sin embargo, la problemática radica en que los medios de comunicación, también sufren de una crisis de carácter moral, lo que ha traído como consecuencia, que desde las propias universidades se haya perdido el verdadero sentido de la vocación, y si existe la misma, casi desaparece al llegar a la actividad profesional, en donde la radio y la televisión se han convertido en una preparación mental hacia la mediocridad en favor del sector empresarial abusivo, mientras que los medios alternativos, por una parte en su desesperación de producir, lo han hecho de manera deficiente y por otro lado, cada vez están más invadidos por aquellos que invadieron a la radio y a la televisión tradicional. La sanación de los medios, radica primero en asumir el compromiso social, de resaltar la vocación de servicio con ética; y segundo, en la originalidad encausada al entretenimiento social.
